Fonteverde, en San Casciano dei Bagni, inmerso en el esplendor de las colinas, ofrece numerosos rituales de bienestar como el masaje antioxidante al tinto noble o el tratamiento facial desintoxicante con arcillas de Crete Senesi.
En Rapolano, puedes elegir entre las Termas Antica Querciolaia, para hacer un tratamiento con una mascarilla facial de arcilla, un masaje antiestrés o revitalizante, una biosauna o una sesión de hammam, y las Termas de San Giovanni con sus espléndidas piscinas que permanecen abiertas los sábados incluso por la noche, para un baño termal bajo las estrellas.
Por último, en las Termas de Petriolo, en Monticiano, conocidas desde la época de los Etruscos, es posible sumergirse en los baños termales terapéuticos, donde se puede redescubrir el equilibrio psicofísico gracias a las propiedades beneficiosas para la salud de estas aguas: el manantial, que brota a orillas del torrente Farma, es rico en sulfuro de hidrógeno y otros componentes que ejercen una acción antiinflamatoria sobre el organismo, reducen la rigidez muscular y alivian el dolor en caso de artrosis.
