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Vista de Peccioli
Photo © TPT
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Peccioli

En las suaves colinas de Valdera, el pueblo premiado por el Touring Club

El pueblo de Peccioli domina la Valdera desde lo alto de su colina y es un centro con una notable vocación turística. El piueblo recibió la Bandera Naranja del Touring Club Italiano por la conservación de su paisaje, su hospitalidad y la valorización del patrimonio cultural.

Peccioli hunde sus raíces en un pasado agrícola, aún hoy visible en en el territorio, caracterizado por la presencia de empresas vinícolas pero también de almazaras, granjas y agroturismos. Además de haber conservado su trazado medieval, el territorio comprende pequeños pueblos de orígenes antiguos como: Cedri, Ghizzano, Fabbrica, Montecchio, Libbiano y Legoli.

Peccioli es un destino popular para turistas italianos y extranjeros, gracias también a su estratégica ubicación cerca de las ciudades artísticas más bellas de Toscana.

Qué puedes ver en Peccioli

Nada más llegar, el pueblo destaca en el escenario de las colinas con el inconfundible campanario, obra del arquitecto Bellincioni, de la Parroquia de San Verano, del Siglo XI, que alberga valiosas obras de la escuela pisana.

En la Plaza del Pueblo se encuentra el Palacio Pretoriano, en cuya fachada destacan los escudos de armas de los podestá. El Palacio, hoy Museo del Palacio Pretoriano, alberga tres colecciones de iconos: la Colección de iconos rusos F. Bigazzi, la Colección de Iconos de Madera y Bronce del Balneario Belvedere y la Colección de Iconos de Bronce - Donación Giuseppe y Paola Berger; así como la Colección de Grabados y Litografías - Donación Vito Merlini.

El Polo Museístico de Peccioli, gestionado por la Fundación Peccioliper, está compuesto por el Museo Arqueológico, con los hallazgos del Santuario etrusco de Ortaglia y del sitio arqueológico de Santa Mustiola, la Torre de Campanario y el Museo de Arte Sacro

También merece la pena visitar la Iglesia Madonna del Carmine, construida en ladrillo y completamente restaurada en el Siglo XIX tras los daños causados por un terrible terremoto que asoló la zona de Valdera. 

El espléndido paisaje del territorio municipal se caracteriza por crestas de colinas cubiertas de viñedos y olivares, esparcidas de pequeñas aldeas, entre las que destacan el antiguo castillo y la antigua Iglesia Santa Maria Assunta di Fabbrica, Libbiano con su observatorio astronómicoy, por último, Legoli, que conserva el tabernáculo de Benozzo Gozzoli en la Capilla de Santa Caterina .

Los aficionados al arte contemporáneo pueden continuar su viaje en la aldea de Ghizzano: el pueblo alberga obras permanentes de Alicja Kwade y Patrick Tuttofuoco, mientras que las fachadas de las casas llevan la firma del artista inglés David Tremlett.

Nada más llegar, el pueblo destaca en el escenario de las colinas con el inconfundible campanario, obra del arquitecto Bellincioni, de la Parroquia de San Verano, del Siglo XI, que alberga valiosas obras de la escuela pisana.

En la Plaza del Pueblo se encuentra el Palacio Pretoriano, en cuya fachada destacan los escudos de armas de los podestá. El Palacio, hoy Museo del Palacio Pretoriano, alberga tres colecciones de iconos: la Colección de iconos rusos F. Bigazzi, la Colección de Iconos de Madera y Bronce del Balneario Belvedere y la Colección de Iconos de Bronce - Donación Giuseppe y Paola Berger; así como la Colección de Grabados y Litografías - Donación Vito Merlini.

El Polo Museístico de Peccioli, gestionado por la Fundación Peccioliper, está compuesto por el Museo Arqueológico, con los hallazgos del Santuario etrusco de Ortaglia y del sitio arqueológico de Santa Mustiola, la Torre de Campanario y el Museo de Arte Sacro

También merece la pena visitar la Iglesia Madonna del Carmine, construida en ladrillo y completamente restaurada en el Siglo XIX tras los daños causados por un terrible terremoto que asoló la zona de Valdera. 

El espléndido paisaje del territorio municipal se caracteriza por crestas de colinas cubiertas de viñedos y olivares, esparcidas de pequeñas aldeas, entre las que destacan el antiguo castillo y la antigua Iglesia Santa Maria Assunta di Fabbrica, Libbiano con su observatorio astronómicoy, por último, Legoli, que conserva el tabernáculo de Benozzo Gozzoli en la Capilla de Santa Caterina .

Los aficionados al arte contemporáneo pueden continuar su viaje en la aldea de Ghizzano: el pueblo alberga obras permanentes de Alicja Kwade y Patrick Tuttofuoco, mientras que las fachadas de las casas llevan la firma del artista inglés David Tremlett.

En los alrededores

Las Tierras de Pisa custodian tesoros gastronómicos y vinícolas de incalculable valor. Entre los viñedos de Terricciola, antiguo pueblo de origen etrusco, pasa el Camino del Vino de las Colinas de Pisa que comprende Valdera y Valdarno Inferiore, hasta Val di Cecina. Además del vino, en la zona se pueden degustar otras especialidades como el aceite de oliva virgen extra, las trufas y el queso pecorino.

Continuando el viaje, llegamos a Lajatico, pueblo natal de Andrea Bocelli, que cada año invita a artistas internacionales a actuar en el sugestivo escenario del Teatro del Silenzio.
La pequeña aldea de Orciatico es famosa por sus castañas y los molinos de viento construidos a finales del Siglo XVII y que aún se conservan en buen estado.

Por último, merece la pena visitar el llamado Castillo de Capannoli, o bien, la cima de la colina donde antaño se alzaba la fortaleza. Hoy en día, se puede entrar en la Villa Baciocchi y pasear por el parque botánico, donde hay más de 160 tipos de plantas exóticas, algunas de las cuales son seculares. 

Las Tierras de Pisa custodian tesoros gastronómicos y vinícolas de incalculable valor. Entre los viñedos de Terricciola, antiguo pueblo de origen etrusco, pasa el Camino del Vino de las Colinas de Pisa que comprende Valdera y Valdarno Inferiore, hasta Val di Cecina. Además del vino, en la zona se pueden degustar otras especialidades como el aceite de oliva virgen extra, las trufas y el queso pecorino.

Continuando el viaje, llegamos a Lajatico, pueblo natal de Andrea Bocelli, que cada año invita a artistas internacionales a actuar en el sugestivo escenario del Teatro del Silenzio.
La pequeña aldea de Orciatico es famosa por sus castañas y los molinos de viento construidos a finales del Siglo XVII y que aún se conservan en buen estado.

Por último, merece la pena visitar el llamado Castillo de Capannoli, o bien, la cima de la colina donde antaño se alzaba la fortaleza. Hoy en día, se puede entrar en la Villa Baciocchi y pasear por el parque botánico, donde hay más de 160 tipos de plantas exóticas, algunas de las cuales son seculares. 

Eventos

Entre los principales acontecimientos de Peccioli destaca la reseña teatral 11 Lune, que se celebra cada mes de julio en el Anfiteatro Fonte Mazzola: una estructura construida con materiales ecológicos según las técnicas más avanzadas de construcción ecológica. El evento ha recibido a importantes personalidades del mundo del espectáculo, como Renzo Arbore, Gino Paoli, Danilo Rea, Fiorella Mannoia y Gabriele Lavia. 

El 26 de diciembre y el 6 de enero de cada año, el centro histórico de Peccioli acoge 11 Lunas de Invierno, una reseña de espectáculos callejeros, talleres creativos y actividades lúdico-didácticas.

En marzo tiene lugar Pensaba Peccioli, un festival de tres días para entender lo que nos sucede, a nosotros y al mundo, a cargo de Luca Sofri con destacados periodistas, escritores, políticos, científicos, actrices, editores, directores, arquitectos y artistas.

En octubre se celebra la carrera ciclista Coppa Sabatini, en memoria del corredor de Pecciolo, Giuseppe Sabatini.

Entre los principales acontecimientos de Peccioli destaca la reseña teatral 11 Lune, que se celebra cada mes de julio en el Anfiteatro Fonte Mazzola: una estructura construida con materiales ecológicos según las técnicas más avanzadas de construcción ecológica. El evento ha recibido a importantes personalidades del mundo del espectáculo, como Renzo Arbore, Gino Paoli, Danilo Rea, Fiorella Mannoia y Gabriele Lavia. 

El 26 de diciembre y el 6 de enero de cada año, el centro histórico de Peccioli acoge 11 Lunas de Invierno, una reseña de espectáculos callejeros, talleres creativos y actividades lúdico-didácticas.

En marzo tiene lugar Pensaba Peccioli, un festival de tres días para entender lo que nos sucede, a nosotros y al mundo, a cargo de Luca Sofri con destacados periodistas, escritores, políticos, científicos, actrices, editores, directores, arquitectos y artistas.

En octubre se celebra la carrera ciclista Coppa Sabatini, en memoria del corredor de Pecciolo, Giuseppe Sabatini.

Platos y productos típicos

En la campaña de Peccioli hay numerosas granjas que producen vino, aceite y fruta. Te aconsejamos probar la uva colombana de Peccioli, de sabor dulce y azucarado y aroma intenso. Entre los dulces típicos de este territorio destacan los  bastoncelli, obleas de anís que a primera vista pueden recordar a la Nozza de Calcinaia o a los Brigidini de Lamporecchio, pero se diferencian por su forma ondulada.

En la campaña de Peccioli hay numerosas granjas que producen vino, aceite y fruta. Te aconsejamos probar la uva colombana de Peccioli, de sabor dulce y azucarado y aroma intenso. Entre los dulces típicos de este territorio destacan los  bastoncelli, obleas de anís que a primera vista pueden recordar a la Nozza de Calcinaia o a los Brigidini de Lamporecchio, pero se diferencian por su forma ondulada.

Tierras de Pisa