Skip to content
Manciano
Photo © TPT
Photo © TPT

Manciano

En el corazón de Maremma, panoramas encantadores y el atractivo de las termas

El territorio de Manciano se extiende sobre una amplia parte de las tierras en Maremma del sur. El pueblo, encaramado en una colina, observa una inmensa campaña con preciosos pueblos medievales, senderos en la naturaleza para todo tipo de excursiones, zonas de descanso e interesantes museos.

En Manciano el viento sopla de todas las direcciones, así como en el mismo modo se puede dirigir la mirada, desde la Montaña Amiata en Argentario, hasta las islas del Archipiélago.

Qué puedes ver en Manciano

En el centro del pueblo surge el Alcázar, un poderoso edificio del siglo XII que, desde los tiempos del Gran Ducado, ha sido la sede del Palacio Municipal. Sus salas son de por sí un museo por sus importantes evidencias de historia y de arte, y su torre, aunque reconstruida, es accesible para disfrutar del panorama.

Seguramente, los orígenes de Manciano y los asentamientos en los alrededores son antiquísimos. Son numerosos los sitios arqueológicos que narran la historia del pasado de estas zonas y muchos son los hallazgos que todavía se encuentran, y que luego se custodian en modo adecuado en interesantes museos. En particular, se distingue el Museo de la Prehistoria y la Protohistoria del Valle de la Flor, dentro del Palacio Nardelli en el centro histórico de Manciano. Es un museo donde lo antiguo asume la forma de lo contemporáneo, revelándose con medios actuales e interactivos: a través de reconstrucciones tridimensionales y realidad aumentada, se emprende un viaje moderno de millones de años.

Las oportunidades para los apasionados de Indiana Jones no terminan aquí, porque en Manciano se han encontrado restos etruscos y romanos, como en Poggio Murella, Poggio Capanne y la necrópolis Puntone, con unas cuarenta tumbas.

En el centro del pueblo surge el Alcázar, un poderoso edificio del siglo XII que, desde los tiempos del Gran Ducado, ha sido la sede del Palacio Municipal. Sus salas son de por sí un museo por sus importantes evidencias de historia y de arte, y su torre, aunque reconstruida, es accesible para disfrutar del panorama.

Seguramente, los orígenes de Manciano y los asentamientos en los alrededores son antiquísimos. Son numerosos los sitios arqueológicos que narran la historia del pasado de estas zonas y muchos son los hallazgos que todavía se encuentran, y que luego se custodian en modo adecuado en interesantes museos. En particular, se distingue el Museo de la Prehistoria y la Protohistoria del Valle de la Flor, dentro del Palacio Nardelli en el centro histórico de Manciano. Es un museo donde lo antiguo asume la forma de lo contemporáneo, revelándose con medios actuales e interactivos: a través de reconstrucciones tridimensionales y realidad aumentada, se emprende un viaje moderno de millones de años.

Las oportunidades para los apasionados de Indiana Jones no terminan aquí, porque en Manciano se han encontrado restos etruscos y romanos, como en Poggio Murella, Poggio Capanne y la necrópolis Puntone, con unas cuarenta tumbas.

En los alrededores

Llamar aldeas a los habitados alrededor de Manciano es reductivo: cada uno de ellos es único e interesante para visitar. Por ejemplo, Montemerano con su Plaza del Castillo y su atmósfera de fábula, es conocido en todo el mundo.
Su carácter netamente medieval lo envuelve en el misterio y lo convierte en uno de los Pueblos más bellos de Italia".
Además mencionamos Marsiliana, una antigua ciudad etrusca, donde hoy es posible visitar, en la Finca de los Corsini, el Museo de la Finca, una exposición compuesta por utensilios, mobiliario y vestimenta que representan la vida en la finca en el Siglo XIX.

Hay otros lugares que puedes visitar, como Saturnia, que también tiene un pasado etrusco y romano y un presente que es famoso gracias a su termas. Las aguas sulfurosas que fluyen a 37,5°C.  ofrecen momentos de relax, por ejemplo en las Cascadas del Molino, de las piscinas naturales al aire libre frecuentadas por visitantes de todo el mundo.

Llamar aldeas a los habitados alrededor de Manciano es reductivo: cada uno de ellos es único e interesante para visitar. Por ejemplo, Montemerano con su Plaza del Castillo y su atmósfera de fábula, es conocido en todo el mundo.
Su carácter netamente medieval lo envuelve en el misterio y lo convierte en uno de los Pueblos más bellos de Italia".
Además mencionamos Marsiliana, una antigua ciudad etrusca, donde hoy es posible visitar, en la Finca de los Corsini, el Museo de la Finca, una exposición compuesta por utensilios, mobiliario y vestimenta que representan la vida en la finca en el Siglo XIX.

Hay otros lugares que puedes visitar, como Saturnia, que también tiene un pasado etrusco y romano y un presente que es famoso gracias a su termas. Las aguas sulfurosas que fluyen a 37,5°C.  ofrecen momentos de relax, por ejemplo en las Cascadas del Molino, de las piscinas naturales al aire libre frecuentadas por visitantes de todo el mundo.

Eventos

Cada año, a finales de septiembre, en Manciano celebra la Fiesta de de las Bodegas, un evento dedicado a la cultura gastronómica y vinícola de Maremma.
Las bodegas del centro histórico están abiertas todo el fin de semana para preparar platos típicos de la tradición local, ofreciendo platos a base de jabalí, acquacotta (sopa de verduras con pan), ciaffagnoni (crepes saladas). Por supuesto, todo ello acompañado de los extraordinarios vinos blancos y tintos de las bodegas locales.

Cada año, a finales de septiembre, en Manciano celebra la Fiesta de de las Bodegas, un evento dedicado a la cultura gastronómica y vinícola de Maremma.
Las bodegas del centro histórico están abiertas todo el fin de semana para preparar platos típicos de la tradición local, ofreciendo platos a base de jabalí, acquacotta (sopa de verduras con pan), ciaffagnoni (crepes saladas). Por supuesto, todo ello acompañado de los extraordinarios vinos blancos y tintos de las bodegas locales.

Productos locales

Un plato típico de la cocina local es el ciaffagnone relleno, una especie de crepe rústica, hecha con agua, huevos, harina y sal. Cuando Catalina de los Medici se casó con el segundo hijo del Rey de Francia en el 1533, se llevó consigo a sus cocineros y pasteleros, poniendo en su maleta también los excelentes productos de su tierra toscana, como el aceite de oliva virgen extra y el queso pecorino. Uno de los cocineros de Caterina era originario de Manciano y por esta razón, se cree que los ciaffagnoni son los antepasados de los famosos crepes franceses.

Un plato típico de la cocina local es el ciaffagnone relleno, una especie de crepe rústica, hecha con agua, huevos, harina y sal. Cuando Catalina de los Medici se casó con el segundo hijo del Rey de Francia en el 1533, se llevó consigo a sus cocineros y pasteleros, poniendo en su maleta también los excelentes productos de su tierra toscana, como el aceite de oliva virgen extra y el queso pecorino. Uno de los cocineros de Caterina era originario de Manciano y por esta razón, se cree que los ciaffagnoni son los antepasados de los famosos crepes franceses.

Maremma del Sur