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Torre de Bargiglio
Photo © Unione dei Comuni Media Valle del Serchio
Photo © Unione dei Comuni Media Valle del Serchio

Torre de Bargiglio

tour
Monumentos

Un mirador que ofrece impresionantes vistas de Garfagnana

La Torre de Bargiglio está situada en el homónimo Monte "Bargiglio", en el Municipio de Borgo a Mozzano, a las puertas de Garfagnana. Una vez que se llega a la Torre, la vista es realmente extraordinaria, con un panorama de 360 grados con una vista perfecta: desde las cumbres de los Alpes Apuanos hasta los numerosos Castillos y Fortalezas de Garfagnana, como el Castillo de Castiglione y la Fortaleza de Monte Alfonso. También se divisa claramente todo el valle del Serchio: desde las murallas de Barga y Coreglia Antelminelli hasta Bagni di Lucca, la ciudad de las Termas y sus alrededores, pasando por las numerosas localidades del Municipio de Pescaglia. Y por último, a lo lejos, al sur, la Piana di Lucca. 

Torre de Bargiglio
Torre de Bargiglio - Credit: Unione dei Comuni Media Valle del Serchio

En la Edad Media, el Monte Bargiglio se convirtió en un lugar de construcción como punto de observación, desde la época Matildica hasta la llegada del condotiero Castruccio Castracani. Tras su muerte en 1328, el destino de la fortaleza estuvo marcado por numerosas diatribas que acabaron conduciendo a su destrucción. Posteriormente, sólo se reconstruyó la torre, que se convirtió en el medio fundamental de comunicación con Lucca durante el periodo de las guerras entre señoríos.

La torre, también conocida como el Ojo de Lucca , se comunicaba mediante señales luminosas (fuego y espejos), de humo y acústicas (salvas de arma de fuego o artillería). Las señales se enviaban, o recibían, desde la "Torre de Palacio", situada en la actual Plaza Napoleón en Lucca, y se replicaban hacia las demás torres o fortificaciones visibles desde Bargiglio, alertando así a la milicia. Hasta el final de la segunda guerra de Garfagnana , en 1618, fue necesario el buen funcionamiento de la torre de Bargiglio.

Tras el final de la guerra, la torre sufrió un lento declive. El advenimiento de Napoleón en 1805 la hizo casi inutilizada hasta que se derrumbó lentamente. Recientemente ha sido objeto de una importante recuperación, respaldada por investigaciones arqueológicas e históricas. Hoy es un destino turístico y ofrece, además de una vista excepcional, un recorrido didáctico a través de los carteles y de las indicaciones geográficas/históricas colocadas en los restos de la torre.

La forma más fácil de llegar a la Torre es en coche hasta la Localidad de Cune y después a pie, con un paseo de unos 15 minutos. También son posibles recorridos alternativos por antiguos caminos de herradura.